Guerra y Paz

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Moeh Atitar de la Fuente

Periodista, fotógrafo y blogger. Más sobre el autor.

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EE.UU y la perdida de la supremacía comunicativa

Moeh Atitar de la Fuente - Monday 22 de January de 2007

Ver para creer: hace una década era impensable que a EE.UU. se le pudiera hacer frente militarmente; éste poder también se extendía a los medios de comunicación con cobertura internacional. Tenía la supremacía de la información a nivel mundial. Hoy, dos fenómenos interrelacionados han puesto fin a esta supremacía comunicativa, no siempre informativa, y si propagandística.
Por un lado la extensión de Internet ha permitido que cualquiera que tenga acceso a la Red se pueda convertir en un emisor, y que su mensaje llegue a miles de personas. Antes, la calidad del mensaje se medía dependiendo de la audiencia pasiva del medio. Así, la supremacía era clara, y en parte aún hoy lo sigue siendo. Con el uso de Internet, hemos pasado de una comunicación solo horizontal y unidireccional, a una comunicación distribuida, en el que el mensaje no termina en la audiencia, sino que la audiencia se convierte potencialmente en un emisor. Lo paradójico es que los medios de comunicación ayudan a esa estrategia. La guerra de Irak nos da miles de ejemplos: cuando la insurgencia graba alguna de sus acciones, las cuelga en Internet, porque sabe que si las envía a un medio o no se van a emitir, o se van a emitir previamente edulcoradas. Así si inicia una comunicación distribuida, hasta que los propios medios se hacen eco de esos vídeos y pasan a distribuirla de una manera horizontal a su audiencia masiva. Un ejemplo lo tenemos en la CNN y el caso del francotirador. Pero aún más reciente ha sido el caso de la grabación clandestina de la ejecución de Saddam Hussein.
El segundo fenómeno es la extensión del uso de los satélites comerciales de televisión. Básicamente, resumiendo y simplificando, en los años 80, con la administración Reagan se llegó a la conclusión de que una buena manera de pagar todo el gasto militar – recuerden el proyecto de Guerra de las Galaxias – era abrir los satélites a su uso comercial, de tal manera que el entretenimiento – información pagara estos gastos. La CNN es la consecuencia de esta decisión, que alcanzó su punto álgido en la Guerra del Golfo, como única televisión de 24 horas de información y con una audiencia potencialmente global. El uso de los satélites se extendió a otras regiones del mundo, como el mundo árabe. Muchos estarán pensando en el paradigma de Aljazeera, pero hay una infinidad de televisiones estatales y privadas.

Capturas de la televisión iraquí Al Zawra. NYT

Esos satélites no los controla EE.UU., con lo cual no puede controlar la información. Un ejemplo que ha saltado a los medios: la televisión pirata iraquí por satélite Al Zawra, que muestra imágenes de las acciones de insurgentes sunis contra tropas estadounidenses y contra población supuestamente chií. El calificativo de pirata se debe a que ha sido prohibida por las autoridades iraquíes, pero eso da igual, porque sigue emitiendo a través del satélite egipcio Nilesat. El gobierno egipcio se lava las manos ante las quejas del gobierno iraquí y del estadounidense. Mientras, el dueño de la emisora, Meshaan al-Juburi – antiguo miembro del parlamento iraquí – vive en Siria, donde escapó tras ser acusado supuestamente de estafar millones de dólares a los estadounidense en el cobro de salarios a inexistentes soldados que protegía un oleoducto.