Djibouti, base militar
Moeh Atitar de la Fuente - Tuesday 9 de January de 2007
Por primera vez desde el desastre de la intervención de 1993, EE.UU reconoce que ha realizado una operación al sur del territorio somalí contra supuestos miembros de Al Qaeda. EE.UU. ha señalado a la Unión de Cortes Islámicas de Somalia como aliado de Alqaeda, y acusa de colaborar y dar cobijo a los responsables de los atentados de 1998 contra las embajadas estadounidenses en Kenya y Tanzania.
La operación ha sido lanzada por unidades de fuerzas especiales basadas en Djibouti, mediante el bombardeo con un AC-130. En Djibouti EE.UU mantiene una base de contraterrorismo desde 2002. Las tropas allí desplegadas pertenecen, en su mayor parte, a fuerzas especiales, destinadas a lanzar operaciones concretas y puntuales, como la realizada el pasado domingo.
EE.UU. mantiene entre 800 y 1800 efectivos en Djibouti, dependiendo de las fuentes. Además, éstas base se ha convertido en lugar visitable por los presidenciables, entre ellos Barack Obama.
La posición geoestratégica de Djibouti es clave: se puede controlar la salida y entrada del Canal de Suez, está justo a 20 kilómetros de Yemen, limintando con Somalia, Eritrea y Etiopía, quienes protagonizan la última guerra olvidado que ha saltado a los medios recientemente.
EE.UU. no es el único país que tiene importantes fuerzas militares en África. Francia tiene desplegados en el continente africano unos 6.000 efectivos. Independizado de Francia en 1977, Djibouti sigue teniendo lazos estrechos con su antigua metrópoli. Militarmente – adiestramiento a las tropas nacionales aparte – se materializa con la presencia permanente de la 13º semi brigada de la Legión Extranjera, que lleva desde 1962 en éste pequeño país del Cuerno de África: Djibouti solo tiene unos 600.000 habitantes, repartidos en 23.000 km².
La operación ha sido lanzada por unidades de fuerzas especiales basadas en Djibouti, mediante el bombardeo con un AC-130. En Djibouti EE.UU mantiene una base de contraterrorismo desde 2002. Las tropas allí desplegadas pertenecen, en su mayor parte, a fuerzas especiales, destinadas a lanzar operaciones concretas y puntuales, como la realizada el pasado domingo.
EE.UU. mantiene entre 800 y 1800 efectivos en Djibouti, dependiendo de las fuentes. Además, éstas base se ha convertido en lugar visitable por los presidenciables, entre ellos Barack Obama.
La posición geoestratégica de Djibouti es clave: se puede controlar la salida y entrada del Canal de Suez, está justo a 20 kilómetros de Yemen, limintando con Somalia, Eritrea y Etiopía, quienes protagonizan la última guerra olvidado que ha saltado a los medios recientemente.
EE.UU. no es el único país que tiene importantes fuerzas militares en África. Francia tiene desplegados en el continente africano unos 6.000 efectivos. Independizado de Francia en 1977, Djibouti sigue teniendo lazos estrechos con su antigua metrópoli. Militarmente – adiestramiento a las tropas nacionales aparte – se materializa con la presencia permanente de la 13º semi brigada de la Legión Extranjera, que lleva desde 1962 en éste pequeño país del Cuerno de África: Djibouti solo tiene unos 600.000 habitantes, repartidos en 23.000 km².
Djibouti es un trozo de tierra reseco azotado por los vientos que no posee prácticamente ningún medio de subsistencia. La presencia militar francesa es y ha sido su principal fuente de ingresos, reportando al país unos cientos de millones de dólares ( durante la Guerra Fría Arabia Saudí pagó parte de los costos de la estancia militar francesa ). Su otra gran fuente de ingresos son las tasas que cobra a Etiopía por usar su puerto. Y por desgracia, la tercera y en aumento el tráfico de khat.
Posición estratégica, pero vida miserable para sus habitantes.