La guerra contra las drogas
Moeh Atitar de la Fuente - Saturday 23 de May de 2009
Los cambios en la Casa Blanca han traído un nuevo zar de la lucha contra las drogas: Gil Kerlikowske. La expresión “guerra contra las drogas” — que activó el presidente Reagan y que han usado todos los consiguientes presidentes — parece haber pasado a mejor vida, “porque parece que estamos en guerra contra las personas, no contra un producto (…) y nosotros no estamos en guerra contra la gente en este país”. Parece que la administración Obama quiere variar la perspectiva pasando de ser un problema fundamentalmente penal, a ser un problema de salud pública. Así la nueva administración no enviará a agentes federales a las clínicas de los 13 estados donde es legal dispensar marihuana de manera terapéutica, como si sucedía con la predecesora. “La legalización no está en el vocabulario del presidente, y tampoco en el mio”, aclaraba Kerlikowske unos días después en un acto frente a 300 agentes de policía.
En Los intoncables de Eliot Ness, un periodista le pregunta a Kevin Cosner (el agente Ness) qué iba a hacer en el momento que se había legalizado de nuevo el alcohol. “Tomarme un trago”, creo recordar que contestaba. En el caso de la marihuana no creo que de legalizarse mucha gente contestara “fumarme un porro”. Es un problema, el de la marihuana, multiplicado por su penalización. En el blog de The Raw Story recuerdan con un vídeo la historia de la marihuana, usada, por ejemplo por la Reina Victoria de Inglaterra para calmar sus dolores menstruales.