Acusaciones contra los jerifaltes de Blackwater
Moeh Atitar de la Fuente - Wednesday 5 de August de 2009
Un ex empleado de la firma de seguridad privada Blackwater y un ex marine que trabajó en operativos de seguridad para la compañía, han hecho unas explosivas acusaciones contra su antiguo jefe, el multimillonario Eric Prince.
La acusación más seria, que recoge Jeremy Scahill en The Nation, es que Prince “mató o ayudó a matar a individuos que estaban cooperando con las autoridades federales en la investigación de la compañía. El ex empleado afirma que Prince se ve a si mismo como un cruzado cristiano con la tarea de eliminar musulmanes y la fé islámica del globo”.
Los dos testificantes ante la corte federal de Virginia implican a la firma Blackwater en el tráfico de armas en Irak, ya que empleados introducían armas en el país en bolsas de comidas para perros (algo que ya se estaba investigando). Además Prince y otros jerifaltes destruyeron o mandaron destruir videos, emails y otros documentos incrimintarios.
Los ex empleados narran en sus declaraciones como empleados de Blackwater aseguraban querer ir a Irak para matar, y que la compañía no hacía nada pese a conocer sus intenciones y tener informes que señalaban su dudosa salud mental. Narran un caso en el que, tras matar a un iraquí que iba en su vehículo, no dieron cuenta ni a las autoridades iraquíes, ni al Departamento de Estado, pero tampoco tomaron medidas contra los empleados implicados en el uso de una fuerza innecesaria.
En una de las declaraciones, el ex empleado acusa a Prince de contrar, sabiéndolo, a ex combatientes en Kosovo que habían estado implicados en redes de prostitución.
Las dos declaraciones, que The Nation recoge en PDF ( 1 y 2) , están jalonadas de acusaciones de este tipo, y vienen a reafirmar otras acusaciones contra la empresa ya conocidas, como el uso de municiones y armas prohibidas por el propio Departamento de Estado.
Esta por ver a dónde llegan estas acusaciones, y sobre todo si es posible probarlas. Quizá la mayor imprudencia que cometieron Prince y compañía fue hacer o dejar hacer todas estas cosas a los ojos de muchos. Se veían imprescindibles, se creían intocables.