Dos sobre Irak
Saturday, December 6th, 2008
Cargos para los responsables de una matanza. El 17 de septiembre de 2007, 17 civiles iraquíes fueron asesinados en Bagdad al paso de un convoy del Departamento de Estado de EE UU escoltado por empleados de Blackwater. Los empleados de seguridad abrieron fuego contra la multitud que se agolpaban en plaza de Nisour. No había ninguna amenaza que justificara el uso del fuego, y menos de manera tan despropocionada. Según anuncia NYT, el próximo lunes se presentarán cargos contra cinco de los seis empleados de seguridad que participaron en el tiroteo.
Todos ellos pasaron por el ejército antes de enrolarse en la compañía de seguridad e impunidad privada, llamados por el aumento del sueldo o porque en el ejército habían sido rechazados. Paul Slough, el que era señalado como líder del grupo, se metió en Blackwater al ser rechazado en un cuerpo de élite del ejército de EE UU por una lesión que arrastraba en sus tiempos de jugador de futbol americano.
Los abogados de estos futuros acusados ya están trabajando para lograr un acuerdo y no llegar al juicio. Tienen las espaldas cubiertas, porque uno de los últimos decretos firmados por el procónsul Bremer antes de ceder el poder a los iraquíes fue el que daba inmunidad a los empleados de las empresas de seguridad en suelo iraquí.
Todo parece señalar que se ha encontrado un resquicio: una ley antidroga de tiempos de Reagan sobre el uso desproporcionado de armas de fuego les puede mantener treinta años bajo la sombra. La pregunta es sencilla: ¿A qué pena se enfrentarían estos mismos individuos si el tiroteo se hubiera efectuado en tierras estadounidense?
Retirada maquillada. Presentación del equipo de seguridad de Obama: “Dije que íbamos a retirar nuestras tropas de combate en Irak en 16 meses, con la compresión de que pueda ser necesario, de que sea probablemente necesario mantener una fuerza residual para proporcionar entrenamiento, soporte logístico, para proteger a nuestros civiles en Irak”. Se baraja que esas fuerzas residuales puede oscile entre 30.000 y 55.000 efectivos. Actualmente hay cerca de 150.000 soldados estaodunidense en Irak. Se trataría de estar pero sin parecer que se está, para cumplir una promesa electoral.Veamos si aclara su postura al menos ambigua sobre los empleados de empresas de seguridad privada.