Trogloditas
Moeh Atitar de la Fuente - Saturday 30 de December de 2006
Saddam Hussein ha sido ejecutado esta mañana; Irak amenece entre el júbilo de la población chii, y un atentado en Kufa que deja al menos 36 muertos. La ejecución del dictador muestra un Irak aún más dividido y con más muertos.
—–
Atentado terrorista de ETA en el aeropuerto de Barajas, Madrid. La tregua se ha roto, interrumpido. Hay un desapericido y cinco personas heridas. Los únicos culpables son los de siempre: los terroristas.
—-
Todos los calificativos que se les ocurra valen. La pena de muerte es una muestra de barbarie, tanto como los atentados terroristas. Pero a mi, para no escupir palabras de rabia, solo se me ocurre llamarles una cosa: trogloditas.
Me parece poco llamarles trogloditas, que lo son. Los de la edad de Piedra debían matar por necesidad vital, estos ni por ideologia ni por nada simplemente por que se han acostumbrado a vivir del terror…que hecho tan espantoso matar a dos personas que estan esperando a sus familiares en la T4…con eso ¿hacen más grande Euskadi?.Solo han conseguido enterrar de nuevo a la esperanza. La mayoría de los vascos se sienten avergonzados de esos asesinos pero tienen que decirlo muy alto, si no nunca se logrará vivir en paz…
Es lo minimo que se les puede llamar…Nada tienen que ver con los vascos. Los asesinos no tienen patria.
La pena muerte es una muestra de civilización. Una sociedad que admite que criminales horrendos sigan formando parte de ella, llegando incluso a mantenerlos con el dinero de sus víctimas, es una sociedad enferma, decadente e inmoral. Los adjetivos que mejor le van a esta Europa nuestra, vamos.
Lo más alucinante es ver a gente supuestamente de izquierdas oponiéndose a las ejecuciones con argumentos sacados del cristianismo más sonrojante, apelando a un supuesto derecho sagrado a la vida, situado más allá de toda racionalidad. El mundo al revés.
En cuanto a lo de la ETA, son sencillamente lamentables los intentos de hacer pasar los atentados como asesinatos comunes, con perlas como esa de que “los asesinos no tienen patria”. Los atentados no son obras de cuatro enajenados; son ataques dirigidos metódicamente contra el estado español. Contra España, no contra la Humanidad, ni contra la Democracia, ni contra la Paz – la ETA lucha por la paz, otra cosa es que la paz etarra sea incompatible con la paz española.
Y si España no estuviese aquejada de este tumor en forma de humanismo postmoderno, tan propio de las “democracias avanzadas”, esos criminales estarían bajo tierra en calidad de enemigos del estado, y no condicionando la política de todo un país durante décadas mientras los mansos de corazón rezan para que, con un poco más de diálogo, acaben por deponer las armas.
Yo estoy totalmente en contra de la pena de muerte, ya que supone una muestra de poca civilización. Supone ponerse a la altura de los asesinos, violando lo más fundamental que tenemos: los Derechos Humanos. Puede que todo esto lo considere usted una muestra de nuestro humanismo posmoderno, y propio de nuestras democracias avanzadas. Pues si, yo lo creo y lo defiendo. Es una perla que tenemos que cuidar todos.