La crónica de las elecciones de ayer: “Urna por urna, las cadenas de televisión paquistaníes informaban anoche del recuento de los votos de unas elecciones consideradas como un referéndum sobre el presidente Pervez Musharraf. La Comisión Electoral de Pakistán sólo comunicará oficialmente los resultados finales hoy, o tal vez mañana, pero los datos avanzados por los medios de comunicación privados revelaban un fuerte voto de castigo al general golpista que se hizo con el poder en 1999.” Georgina Higueras, en El País.
Es probable que los resultados oficiales sean conocidos hoy. Musharraf los querrá maquillar, con EE UU mirando para otro lado. En Liberation leemos un artículo con los sondeos – el 70% de los paquistaníes quieren que se vaya del poder – y como se ha ido maquillando todo desde el poder. Por lo menos podría decir que ha ganado por poco.
Algunos resultados adelantan un descalabro del partido de Musharraf: “Casi todas las principales figuras de la Liga Musulmana de Pakistan, el partido que ha gobernado los últimos cinco años bajo Musharraf, han perdido sus escaños, incluido el líder del partido, el antiguo presidente del Parlamento y seis ministros”. Tal vez debería decir que han perdido por poco. Sería más creíble